viernes, 27 de abril de 2012

VISTA DESDE LA TORRE DE MARFIL


Me he dado cuenta de que las cosas se pueden ver desde otra perspectiva cuando te sientas cómodo y te fijas en lo más mínimo de los detalles de un día cotidiano entre un grupo de personas que se mueven cual engranaje en esta sociedad tan ocupada.

Atrincherado en una esquina se puede observar de todo un poco comenzando por el que vende las frutas en la esquina más cercana, como cada día llega a su puesto y comienza a organizarse, seleccionando, lavando y picando sus frutas preparándolas de tal manera que los que pasen tenga que detenerse a comprar al menos un guineo maduro. Siguiendo por la acera se observa cómo algunos empleados del ayuntamiento barren los contenes haciendo su trabajo con el uniforme color aguacate a media asta.

Por otro lado cuando llegas al edificio se nota otras actividades como por ejemplo los tipos de la seguridad en su trajín entregando y recibiendo los tickets de entrada a los vehículos, se deja ver como uno que otro le vocea a la morena que siempre cruza a la misma hora camino para su trabajo, un día de estos aspiro a que ella le corresponda el saludo.

Desde la torre también se puede observar como los empleados van copando sus puestos de trabajo, algunas mujeres bien ataviadas y perfumadas que dejan algunas que otra una peculiar fragancia, los caballeros con trajes y corbatas (suerte que trabajan bajo aire), algunos jefes llegan en sus autos lujosos y se nota la mirada con desdén y peor aun cuando se instalan en sus oficinas y ven las cosas distintas en una octava planta.

No se puede dejar de mencionar como los que conforman el equipo de limpieza manejan diestramente las herramientas para que se mantengan las aéreas comunes  como los papeles de música (investiguen como es que están). Se puede observar al edificio del frente más próximo como sus habitantes de ambulan en sus hogares, quien sea que saque un chance y breche se daría banquete con lo que se tropiece.

Finalmente me doy cuenta de que todas las cosas funcionan de una manera que si alguien falla en sus funciones podría desencadenar una serie de eventos desafortunados que podría dar al traste con una mecánica bien aceitada y que lamentablemente muchos la conocen de otra manera llamándola monotonía.

sábado, 10 de marzo de 2012

Cuento de una Madre Soltera...


Esta es la historia de una madre soltera que por un mal entendido de comunicación un viernes en la noche le pasó lo siguiente.

Primer round: no hay quien atienda al terremoto de mi hijo ya que mami va para donde mi hermano y mi hermana no ha salido del trabajo aun (contando que son las 8pm de la noche aproximadamente).

Yo me acabo de quitar un yeso (de lo cual no le había informado a mi querido novio), pero nada yo no calcule absolutamente nada y le dije a mi madre que me iba a andar, en ese mismo instante me dio mi respectiva rellena a la cual no le hice caso; le encaquete al terremoto de mi hijo para que me lo llevara a la parada (porque no quería coger 2 taxis) y salgo con mi carajito para la calle.

El camino conduce hacia el cine, llego no había mucho que ver porque quería ver el rey de najayo (con mi novio quien andaba de juerga con unos panas), como no hay de otra y ando con el terremoto a rastros compro una para ver “un lugar para soñar” que trata de un jevo que se muda para una caza que tiene un zoológico en la casa, pensé: animales, al terremoto de mi hijo seguro le llamara la atención.

Compro mi taquilla la tipa casi me enamora al muchacho y me pongo en el área de comida a esperar las 9:20pm, eran como las 8:30pm, error numero 18 hay un funtastico cerca ya se pueden imaginar que hay luces y colores lo cual llama mucho la atención a un niño de un año y medio que para colmo se quiere montar en los juegos pero les tiene miedo.

Nada, compro una paleta de helado que ni se comió y cuando llega la hora de entrar con el terremoto a la sala de cine todo está bien hasta que se apagan las luces y comenzaron las chinchas a atacar su cuerpo joven. Le muestro los animales y hago sonidos, al menos logro entretenerlo más o menos como 10 minutos cuando comienza una lucha cuerpo a cuerpo con él, lo suelto y lo dejo en el pasillito y antes de pestañar el terremoto había salido de la sala y andaba corriendo en el pasillo a todo esto yo ando coja porque recuérdense que ese mismo día me había quitado un yeso en la tarde.

Segundo round: Arranco atrás del muchacho y lo entro otra vez y comienza de nuevo el mismo sistema, 10 minutos mas y le ajusto un biberón de leche el cual le dio un zumbón, o sea, cine sala oscura y don biberón rodando por todo el pasillo, a lo cual comienza a llorar por hambre, ya en ese preciso momento quería matarlo pero nada agarro a mi carajito por el brazo me abajo en medio del pasillo y comienzo a buscar el biberón a todas estas el terremoto esta rajado dando gritos.

En una encuentro el biberón lo suelto para agacharme y tomarlo y otra vez el carajito con complejo de hijo de flash sale hasta el pasillo, lo agarro lo entro otra vez y me siento en el pasillo cerca de la pantalla y ahí se estuvo 10 minutos más; a todo esto no se bebió la leche porque razón vayan ustedes a saber, el asunto era que ya no la quería.

Aun sentada en el piso del pasillo lo siento en mis piernas a lo cual dura como 5 minutos más e hizo otro show, lo agarre lo saque del cine mas quillada de como llegue con dolor en el pie y el muchacho muerto de la risa desde que salió afuera y mis 100 pesos (era viernes) perdidos.

Ya fuera en el parqueo me decido llamar al cuñado y a mi hermana que habían quedado de ir a buscarme y que luego decidieron que no, mejor que cogiera un taxi. Llego a la casa con el terremoto en un brazo al hombro, del otro lado el bulto y cojeando del pie; lo único bueno es que llegue como a las 10:30pm y se acostó a dormir desde que lo puse en la cama. Creo que por eso durmió tranquilo de lo tanto q jodio en el cine.

De mi parte explotada, un poco menos quillada al ver a mi retoño dormir pero adolorida físicamente por la lucha que me puso a coger mi adorado terremoto.



Moraleja: no salgan a la calle quillada con un niño pequeño un viernes y mucho menos cojeando de un pie, que les pesara.




jueves, 2 de febrero de 2012

De visita al Acuario Nacional con Nono!


Accediendo a una invitación de los compadres  para una visita al acuario no creí que se convirtiera en una aventura para un episodio de las peripecias, pero que se puede esperar si este moreno de felpa se presta para cualquier cosa.

Un domingo cualquier uno no sale de su casa al menos que lo llamen y le informen que hay q sacar a la ahijada de paseo, como es de luxe la ahijada me puse mis prendas y me aliste a salir; se me había informado que además de la ahijada de luxe irían otros niños al acuario a lo que dije que no había problema mientras más mejor.

Entre los actuantes estaban tres sobrinos de los compadres y una pareja de mellizos que son hijos de una compañera de trabajo de la comadre de la M, aclaro que esta pareja (de niño y niña) se veían en primera instancia muy dóciles, a lo que le dije al compadre que este viaje sería un cachú. Pero una vez más estaba más errado que un loco en el manicomio al creer que todo seria pan comido.

En el camino hacia el acuario todo transcurrió con normalidad salvo el caso de la ahijada que iba diciendo que quería ver ballena, yo no sé de donde ella saco esta idea de que en el acuario vería ballena pero como los niñ@s son así pues hay q dejarlos que se desarrollen, cabe destacar que el que anda con una media docena de muchachos tiene que cargar con una serie de bultos para estar preparados para todo.

Cuando llegamos al acuario a los mas grandecitos se les metió un gúto y una alegría por ver a los pecaos, desde mi óptica lo entendí como que el acuario para ellos es una gran pecera donde hay peces muy grandes, estos niñ@s se maravillaron con estrellas de mar, tortugas marinas, pecaos raros que no sabía ni yo que existían, tiburones, y la ahijada a todo esto solo pedía ballena, a lo que la pobre niña no sabía era que la única ballena del lugar la llevamos nosotros y no era nadie menos que su propio padre.

Mientras íbamos desfilando y viendo los diferentes tipos de pájaros del mar al parecer a nono (el mellizo) se le contagio el gúto de los grandecitos y arranco por ahí hacer sus travesuras, que siendo justos no eran tan graves pero si jocosas, entre ellas están que quería zambullirse en la pileta donde estaban las estrellas de mar, o esta el caso de que sabia devolverse sin previo aviso a admirar a los pecaos, si se quedaba parado lo llamábamos y este nos miraba con cara diciendo: yo no ando con ustedes, si tu le decias nono corre, este se mandaba ajuir y se paraba solamente a subirse los pantalones porque se les caian, pero lo hacia de una forma tan graciosa que yo que lo veo no lo creo; antes de que se escape el dato nono lo que tiene son 2 años y medio, en el mismo tenor le pregunto a su madre porque le dicen así y ella me contesta que entre él y la hermanita se llaman así mutuamente y se les has quedado el mote.

Entonces si le sumamos las cosas de nono más las cosas de los otros niños ya se pueden estar dando una idea de las energías que nos hicieron consumir a los grandes, porque las hembras se portaron de forma magistral no dieron de que hablar. Pero la cosa no termina ahí, luego del corrido nos dirigíamos hacia un área verde que está dentro del mismo acuario que al parecer tiene ciertos juegos pero una señal del cielo nos avisaba que no podíamos, era una llovizna tupida que nos hizo retroceder para enfilarnos hacia otro lugar pero nono no cogió esa vuelta al parecer entre el hambre que le apareció, los peces por doquier y los demás niños alegres este quería mas, tanto así que cuando nos dan el preaviso de que en pocos minutos se va a cerrar el acuario nos topamos con unas tortugas que estaban afuera en una pileta, nono raudo y veloz subió por una rampa que estaba resbalosa por la reciente llovizna a ver sus tortugas y no hubo quien lo quitara para que dejara de admirarlas.

Tengo que decir que este viaje hacia el acuario puso a pruebas mis resistencias físicas porque caerle atrás a nono y a sus secuaces no es fácil; lo grande del caso es que ya me comprometieron para que los acompañara al zoológico y solo accedí a ir si nono iba porque sé que me voy a divertir, pero si le advertí a los compadres antes del zoo debemos de buscar un parque en donde dejar que esos niños corran, brinquen y se cansen para nosotros poder crear resistencia.

Pero si usted creyó que el asunto culminaba aquí pues se guayo porque queda alguito mas, a la salida del acuario se le ha ofrecido pizzas, refrescos y helados a los infantes para que cierren su visita a la pecera nacional, me indican que busque la heladería más cercana y que nos aparquemos, para mi suerte al lado queda una pizzería; cuando llegamos el compadre me pregunta si no me voy a desmontar y lo miro seriamente y le digo: compadre y uté cree que me quedan fuerzas para batallar con esos niños?, el compadre se pone la mano en la cabeza con cara de miércoles la maque, luego de unos segundos me dio apuro y tuve que tirarme porque sabía que el compadre solo no podía con esa mini legión comandadas por nono.

Luego de apearlos uno a uno de la verdadera, y agarrados todos de las manos y en fila india iniciamos la entrada al establecimiento, luego tuvimos que hacer la logística de cómo sentarnos, pero los niños querían que sentarse afuera en un patio que había, a lo que le indique al compadre bajito que no había fuerzas para estar cayéndole atrás a nono y sus seguidores, así que nos acomodamos adentro como pudimos.

Pasado un rato y luego de degustar una pizza mientras la ahijada se comía un helado de fresa la comadre por su parte trataba de esquivar como podía para que no la embarrara; y por otro lado estaba nono que en una amago con dormirse hasta que vio a una niña que había llegado y se sentó junto detrás de nosotros y se tiro del regazo de su madre cual bombero se jondea por el tubo para montarse en el camión para salir apagar un incendio y se fue hacerle coro; nosotros aun no comprendemos bien el asunto, me explico, no sabemos si nono se tiro detrás de la niña o detrás la pizza, aun nos quedamos con la incógnita pero mis queridos/as lectores a nono hasta por su nombre de pila se le llamo y este nos hizo el caso del perro, al parecer estaba maravillado con la belleza de la otra niña o se quedo con hambre porque no hubo forma ni manera que este volviera a la mesa por sus propios pies.

Luego de un rato tuvimos que hacer foniuno porque había que regresar a cada uno de los participantes de esta experiencia extrema a sus respectivos hogares, pero si queda claro que hay que estar preparados para caerle atrás a nono y compañía, así que vamos a ver que trae consigo en una próxima peripecia el nuevo miembro del club, el estimado nono.

lunes, 23 de enero de 2012

He vuelto y de que manera


Tras estar retirado un tiempo por vacaciones voluntarias, estoy por aquí de nuevo y vengo con una historia corta que me sucedió recién esta semana que paso.

Todo comienza un sábado cualquiera cuando me disponía salir hacer ciertas diligencias y mi hermano el ingeniero me llama para que lo pase a buscar para que lo acompañe a hacer ciertas averiguaciones, yo le informo que no tendría problema y le digo que me espere listo; cuando me dispongo a salir luego de abordar a la verdadera esta no quiere encender cosa rara porque siempre prende al toque, mis cortos conocimientos de mecánica general me indican que se trata de un problema de batería baja.

Cuando me apeo de la verdadera y abro el bonete para revisar me doy cuenta efectivamente que la batería esta baja porque no quiso ni siquiera encender una lámpara portátil que tengo para casos de emergencias, solamente atino a cruzar los brazos y a echar un chuipi; como no me queda de otra necesito que me ayuden con un jumpeo pero miro para todos los lados y me doy cuenta de que estoy solo. Tomo mi teléfono inteligente y cuando busco en la lista de contactos para marcarle a alguien para que me venga auxiliar me siento incrédulo porque no se me ocurre nadie que me pueda echar una mano, ironías de la vida debido a que soy yo quien salva a todo el mundo.

Por asuntos de logística marco al que me queda más cerca, nada más y nadie menos que al TTP y para mi extrañeza este individuo no contesto ninguno de sus números, tanto el personal como el residencial; vuelvo y reviso mi listado y después de echarle un vistazo desde la “A” hasta la “Y” me quedo analizando que hay gente de mas en el mundo.

No me queda de otra que llamar a mi hermano el ingeniero para que me rescate, le doy las indicaciones precisas de donde me encuentro ubicado para que salga a rescatar al rescatador por excelencia. Luego de casi 20 minutos de darle carga directa de batería a batería la dichosa verdadera le dio el deseo de encender, como ya sé que el problema de la descarga de la batería se debe a una falta de generación decido dejar a la verdadera en la casa y salir en otro vehículo para comenzar hacer las diligencias que estaban pendientes del día.

A todo esto no había podido desayunar por las condiciones antes dadas tuve que hacer una parada rápida en un puesto de empanadas donde me abroche dos más un juguito porque no sabía cuándo volvería a mi casa.

Luego de varias horas de rodar por las principales avenidas de la ciudad y con la pendencia de que tenía que arreglarle el asunto de la generación a la verdadera se me introdujo un leve dolor en el cráneo que casi me deja loco.

No pasa bien este percance y a los pocos días para arreglarme lo que queda de semana se me azara cuando un dichoso motorista decide frenar conmigo en una de las puertas de la verdadera, gracias a Dios que estoy dentro de mi circulo zen y que me dedico a un trabajo donde la paciencia tiene que ser cultivada porque los motoristas siempre tienen la razón (al menos eso es lo que ellos creen).  Pasado un rato de discusión nos pusimos de acuerdo y cada quien iba ir a hacer su reporte a la amet, obvio que de mi bolsillo no iba a salir nada porque evidentemente este individuo salió de la nada para pegarse a mí con complejo de calcomanía.

Y para ponerle la guirnalda al pastel se me picha dos veces la misma goma trasera en diferentes días, no me quedo de otra que tomarlo chilin, reírme para no llorar y cogerlo con calma porque al parecer las estrellas se alinearon para darme una tanda por no haberme pasado nada en diciembre.

P.D.: casi se me olvida comentar que el TTP me llamo horas después del incidente de la descarga de la batería, cuando le explico para que lo llamaba este se me burla por teléfono puesto que me dice que aunque hubiera aparecido no me podía ayudar porque no cuenta con los cables para jumpear.

Está visto que este hombre solo sirve para que me acompañe a beber….